Devocional 16

Día 16- lunes 30 de agosto 2010.

“Porque los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios”

Romanos 8:14

            ¿Por que empezamos hablando del Espíritu? porque nuestro espíritu anhela fervientemente oír la voz de Dios, no solo por escuchar el propósito para nuestras vidas, sino en estos tiempos tan difíciles por los cuales estamos atravesando, el propósito para nuestra nación, congregación, etc. Los hijos estamos expectantes por ver la gloria de Dios en todo lo que nos rodea y en aquello que tanto amamos; nuestra nación, deseamos que Él tome el completo y absoluto rumbo de este nuestro amado país, que tome en sus manos a nuestro dirigente, el Presidente, que él pueda escuchar aún en medio de tanto ruido, que vea la luz en medio de esta oscuridad y que tome como suyos, los sueños que Dios tiene para México.

Sabemos que hace ya mucho tiempo esto ha sido profetizado... pero ahora es el momento... Dios hará ¡grandes cosas en México! Y todos morimos por esa profecía. Morimos por ver un México diferente, que se levante en medio de todas las naciones como el país por donde ha de pasar el Todopoderoso y mostrar a las naciones quien es el Rey de la Gloría. ¡El verdadero Rey!

Dios tiene un amor especial por México, creámoslo así. Hagamos nuestro ese amor. El ama a nuestra nación en gran manera... nos ha librado de todos los problemas que se presentan mundialmente en donde existe devaluación, hambre, muerte, peste, guerra etc. Sin embargo, en nuestro país, es cierto, igualmente, que hay problemas como narcotráfico, drogadicción, prostitución, etc. Pero seguimos de pie y adelante. A lo largo de los años se han entregado vidas inocentes, se han sacrificado seres que nada han hecho, y es por ellos y por todos que debemos levantarnos. ¡Es tiempo!

Es momento que los hijos del Rey arrebatemos el reino y luchemos por México y no en armas; sino en oración y en constante entrega a Él a nuestro Padre. Ya no solo son las buenas acciones o el poner un granito de arena, debemos llevar piedras y más piedras. Es momento de COMPROMISO con Dios… con lo eterno con los propósitos de Dios para esta nación.

Ahora con el tan mencionado Bicentenario, recordamos que hace años, hubo hombres radicales, que creyeron en LIBERTAD y se levantaron en armas por aquello en lo cual creían. Ahora es momento de que los hijos del Rey crean que "si Dios con nosotros quien contra nosotros" y que el verdadero libertador haga la su obra.

Como hijos nos toca obedecer y estar atentos al llamado del Altísimo que quiere hacer grandes cosas, nos toca buscar ser llenados con pasión de lo alto. ¡Que da poder en su Sangre Redentora!

Oración.
            Señor Aquí estamos, queremos estar preparados para lo que quieres hacer, ardemos por ver tu gloria resplandecer. ¡Amamos a México y queremos ser vasijas listas y útiles!... Moldea nuestro ser, danos amor por entregar todo lo que somos y lo que tenemos. Tu voluntad es perfecta y permanecerá por los siglos de los siglos. Padre nada somos sin ti, no nos dejes caer, flaquear en una causa que es tuya, una causa que la hacemos nuestra. ¡Padre clamamos por Ti! Aquí estamos. ¡Tuyos somos! Has tu voluntad buena y perfecta.

Amén.

Betsabé Carrasco.